20121222

Noticias graciosas de lo que pasa en la Comunitat


y los responsables en su casita, disfrutando la vida.. les iría bien un embargo total (aunque sólo sea para cubrir un 1% del agujero que han creado)..


La Generalitat debe 8.500 millones de euros ms de lo que vale su patrimonio. Las Provincias




y ojo que hablan de millones de Euros.. de esos que son tan abundantes..



El Síndic eleva el déficit de liquidez a 16.496 millones y aún hay 300 en facturas ocultas - Levante-EMV



El Plan de Pagos permite una drástica reducción del gasto sanitario no registrado pero el volumen sin cobertura presupuestaria sube 500 millones y llega a los 3.500 La hipoteca de compromisos cargados a gobiernos futuros alcanza los 29.242 millones

El fin del mundo no fue ayer aunque el panorama financiero de la Generalitat que evidencia la fiscalización de la Generalitat sobre 2011 que el Síndic de Comptes, Rafael Vicente, entregó ayer a las Corts no lo querrían ni los mayas. La Cuenta General, hecha pública en septiembre, ofrecía unos datos pavorosos: 8.561 millones de patrimonio neto negativo (la diferencia entre todos los bienes y derechos y las deudas de la Administración) y 15.525 millones de déficit de liquidez (el fondo de maniobra, que indica el desfase entre las deudas a un año que ha de afrontar el Gobierno y el dinero a corto del que puede disponer). La auditoría pone de relieve que la crisis del Consell -en el año en que Francisco Camps fue presidente hasta julio y luego le sucedió Alberto Fabra- era aún más grave. De un lado, el patrimonio neto negativo, según se desprende de la auditoría, debería incrementarse en otros 1.808 millones, hasta sumar 10.369 millones. De otro, el déficit de liquidez oficial obvia 971,9 millones, con lo que debería elevarse a 16.496,9 millones.

Con estas cifras, si la Generalitat fuera una empresa privada estaría en quiebra.
Y por tercer año, aunque con magnitudes agravadas, ya que en 2010 los fondos propios negativos sumaban 1.913 millones y el fondo de maniobra negativo, 8.808 millones. El informe es un espejo de lo que pasa en la calle: Un Consell con los mercados de deuda cerrados y con enormes dificultades para pagar. No en balde, los 16.496 millones de déficit de liquidez comportan que si la Generalitat hiciera efectivos todos sus derechos, aún necesitaría más de un presupuesto anual -para 2013 es de 13.940 millones- para afrontar todas sus deudas a corto plazo.

El ajuste en el dato del patrimonio neto negativo resulta de computar 300,5 millones de facturas en los cajones de Sanidad; 97,9, de gastos de personal no imputados; los planes de inversión de Feria Valencia y las universidades no incluidos por 831,8 millones; y los 573,5 millones en que, según el Síndic, debería incrementarse la provisión por insolvencias (381,4 millones) por ingresos improbables. En cuanto al déficit de liquidez, a los 15.525 millones habría que añadirle una parte de los anteriores: los citados 300,5 millones de gastos sanitario sin registrar, los 573 de provisión por insolvencias y los 97 de personal.

Y todo ello en un ejercicio con caída brutal de ingresos, que se redujeron - sin incluir las emisiones de de deuda- un 8,3 % respecto a 2010 tras el descenso del 10,6 % ese ejercicio respecto a 2009.

Con todo, no todos los datos son calamitosos. Gracias al Plan de Pago a Proveedores, el montante de facturas en los cajones de la Sanidad se redujo drásticamente: De los 1.602,3 millones de 2010 -1.343,1 de la atención sanitaria y 259,2 de farmacia- a 300,5 al cierre de 2011. Aunque la cifra también permite otra lectura: Pese al Plan de Pagos, aún se mantenían 300,5 millones sin registrar en ningún sitio. Además, el gasto de Sanidad ya realizado pendiente de aplicar a un presupuesto -que incluye el monto de facturas en los cajones y las que se reconocieron en el balance pero para las que tampoco había dinero- aumentó, al pasar de 3.000,6 en 2010 a 3.506,8, 506 millones más. Es el lastre de facturas sanitarias que tendrán que absorber futuras cuentas.

Luz y gastos postales, diferidos
El auditor también corrige al alza el volumen de compromisos con cargo a ejercicios futuros que reconocía la Cuenta General, 27.370 millones, y los eleva a 29.242,2 millones. Así, incorpora 1.157 millones de gasto sanitario cuyo pago se ha periodificado a varios años; 81,3 de Feria Valencia: 500,6 del plan de inversiones de las universidades; 26,5 de contratos plurianuales; y 106,6 de tres convenios de reconocimiento de deuda con Tragsa, Correos e Iberdrola, por 106,8 millones, para abonarles en próximos años facturas de luz, gastos postales y brigadas forestales ya realizados.

El auditor lamenta el "atentado" a su independencia
El Síndic, Rafael Vicente Queralt, acudió a las Corts a entregar la auditoría de la Generalitat un día después de aprobarse la ley de presupuestos para 2013, que establece que las modificaciones del capítulo de personal de la Sindicatura requerirán, a partir de ahora, de un informe previo y vinculante de la Conselleria de Hacienda. Un precepto que choca con la ley del órgano fiscalizador (para cuya modificación se precisa mayoría de tres quintos de la Cámara). A preguntas de los periodistas, Rafael Vicente no se mordió la lengua. Recordó que la Sindicatura aprobó por unanimidad que "el sometimiento de su gestión de personal al órgano fiscalizado no era procedente". No en balde, el órgano auditor depende de las Corts para garantizar su autonomía. Sin embargo, el PP no aceptó las enmiendas de la oposición y cambió la ley por mayoría para asegurar el control del personal del Síndic.

Para Vicente, la medida supone un "cierto atentado al principio de independencia" de este órgano que, según la ley que lo rige, "establece la independencia de la gestión presupuestaria de la Sindicatura". A su juicio, "esa independencia tiene que seguir existiendo".

A preguntas de los medios que compararon el estado de la Generalitat con el de un enfermo en coma, el auditor señaló que es "un enfermo que está estable, controlado y siendo tratado adecuadamente". "¿Hay riesgo de fallecimiento o quiebra?", se le inquirió, ante lo que repuso que no conoce "ninguna Administración que haya fallecido". El Consell, agregó, ha adoptado medidas de ajuste "para que el enfermo no se muera" y, preguntado sobre si se ha estado "al borde del colapso", recalcó que la situación ahora "está controlada y con expectativa de solución" aunque no sabe decir en cuánto tiempo.

Fabra: "El esfuerzo vale la pena"
Por su parte, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, destacó en la recepción navideña a los medios que "el esfuerzo ha valido la pena", de forma que gracias a los esfuerzos realizados "en estos momentos estamos en mejor predisposición que hace año". "Estamos mejor a pesar del Ministerio de Hacienda", bromeó.

No hay comentarios: