La amenaza del 'fracking' llega a Navarra

Fuente: Fracturación hidráulica - Wikipedia, la enciclopedia libre
Fuente: La amenaza del 'fracking' llega a Navarra. Diario de Noticias de Navarra

La fracturación hidráulica o fracking, es una técnica para la extracción de gas del subsuelo. El procedimiento consiste en la inyección a presión en capas impermeables del terreno de material de fracturación, a una profundidad de 2.000 a 5.000 metros, con el objetivo de ampliar las fracturas existentes en el sustrato rocoso que encierra el gas o el petróleo, y favoreciendo así su salida hacia el exterior. Habitualmente el material inyectado es agua con arena y productos químicos altamente tóxicos.

Existe una gran controversia sobre el peligro medioambiental derivado de esta técnica, pues además de un enorme consumo de agua, es habitual que junto con la arena se incluyan multitud de compuestos químicos desconocidos, por estar bajo patente, cuya finalidad es favorecer la fisuración o disolución de la roca, y que podrían contaminar tanto el terreno como los acuíferos subterráneos e incluso el aire.

Repercusiones en el medio ambiente

Las principales repercusiones son la contaminación de aguas subterráneas por periodos extremadamente largos de tiempo, debido a los flujos incontrolados de gas, químicos y el vertido incontrolado de aguas residuales. Los fluidos de fracturación contienen sustancias peligrosas y su reflujo contiene además metales pesados y materiales radiactivos como el radón 222 procedentes del subsuelo.

Químicos inyectados en el terreno

Aunque se supone que solo el 2% del material inyectado son químicos, si tenemos en cuenta que para la fracturación hacen falta millones de litros de agua, podemos hacernos una idea de la cantidad de químicos altamente tóxicos que se emplean en la explotación de una perforación de fracking.

Entre los químicos conocidos, que son más de 260 se encuentran 17 tóxicos para organismos acuáticos, 38 tóxicos agudos, 8 cancerígenos probados, 6 sospechosos de serlo, 7 elementos mutagénicos y 5 producen efectos en la reproducción. A éstos hay que sumar los metales pesados y radiactivos que se encuentran de forma natural en el subsuelo y que salen al exterior con el líquido de retorno.

Consecuencias para la tierra y los acuíferos

El agua que hay en el subsuelo cumple una función fundamental en la agricultura, ya que de esa agua depende gran parte de la producción agrícola de muchas explotaciones. Los acuíferos son bolsas de agua, que se sitúan sobre capas impermeables del terreno, como pueden ser rocas como la pizarra. La fracturación de esas rocas, pueden liberar al agua tóxicos que envenenarán el acuífero para siempre.

Si el agua de una región se contamina, tarde o temprano la tierra terminará también contaminando se por la filtración de las aguas a la superficie del terreno, por regarse esos terrenos con aguas procedente de ríos contaminados o pozos.

Una vez contaminado el agua, se hace inviable económicamente el cultivo, ya que sin abundancia de agua limpia, resulta extremadamente difícil sacar adelante un cultivo y si la tierra se contamina, la cosa se complica todavía más y la viabilidad económica se hace imposible.

Quien gana con el fraking

El fraking se lleva empleando desde los años 30, de forma muy puntual en USA, pero nunca terminó de despegar por sus altos costes económicos y medio ambientales.

En la actualidad, EEUU está presionando a multitud de países para que acepten que en su territorio se realicen extracciones de gas usando la técnica del fraking, con la excusa de los altos costes de los combustibles fósiles, de los que USA es responsable, por sus políticas intervencionistas si no de piratería, que obliga a los países productores de petroleo a vender su petróleo en las condiciones y al precio que USA les dicta. EEUU pretende con esta técnica obsoleta, cara e ineficiente contaminar el agua potable y las tierras cultibables, para controlar la alimentación mundial a base de crear mega corporaciones de la alimentación y el agua, que en un futuro próximo, serán las que suministrarán la comida y bebida a la población mundial, por que esas corporaciones anglosajonas serán las que habrán acaparado gran parte del agua, tierras y explotaciones agrícolas en todo el mundo.

EEUU mientras poseía el control sobre el petróleo, tenía garantizada una entrada de divisas que le permitía la impresión descontrolada de dólares a costa de crear inflación en el resto del mundo. Ese control sobre el petróleo cada día se ve más cercano su fin y USA tiene que volver a obligar al resto del mundo a que sigan comprando sus productos en dólares por cualquier medio y ese medio es el control de la comida, ya que como la energía, es un bien del que no se puede prescindir.

Mucho hay escrito sobre los transgénicos y el control de la alimentación mundial. También mucho hay escrito sobre lo que supone, que grandes extensiones de terreno en todo el mundo usen unas semillas protegida por una patente. No hay que ser muy listo para darse cuenta que los transgénicos son un arma económica para el control mundial de la alimentación. Al igual que lo es el agua potable y las tierras cultivables. En definitiva, USA está impulsando con el fraking el envenenamiento a escala mundial de acuíferos y de tierras cultivables, además de la economía de regiones enteras que dependen de la agricultura como medio de subsistencia y de desarrollo económico.

EEUU está acaparando en infinidad de países, grandes recursos naturales relacionados con el agua potable y privatizando su suministro a precios inasumibles para poblaciones de países en desarrollo, que no puede disponer del dinero suficiente para pagar por el agua, que antes era gratuita.

No me extrañaría nada que el accidente de Fukushima hubiese sido provocado, por una detonación nuclear sobre la falla que hay frente a las costas japonesas y que está en una fosa marina a kilómetros de profundidad, para una vez provocado el tsunami sabotear los 4 reactores nucleares y provocar así, la contaminación de los recursos pesqueros de una buena parte del mundo. Una vez contaminada la pesca, la tierra y el agua, a la gente no le quedará más remedio que recurrir a las empresas anglosajonas que han acaparado las pocas fuentes de agua no contaminada, los pocos terrenos cultivables no contaminados y la poca pesca libre de radio isótopos, para que la economía anglosajona vuelva a resucitar de su aparente estado terminal.