El TSJ declara nulo el ERE de Vaersa y ordena readmitir a los empleados
- El TSJ declara nulo el ERE en Vaersa y ordena readmitir a sus 278 empleados
- El altro tribunal valenciano estima que no hubo una auténtica voluntad negociadora con rasgos de buena fe contractual
La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha declarado nulo el ERE en la empresa pública Valenciana de Aprovechamiento Energético de Residuos, SA (Vaersa) y ha ordenado la readmisión de los 278 trabajadores afectados por el mismo.
Así consta en la sentencia, hecha pública este lunes por UGT, del juicio celebrado el pasado día 15 ante la petición de varios sindicatos de declarar la nulidad del expediente de regulación de empleo de Vaersa, dependiente de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente.
El TSJCV estima que no se negoció de buena fe por parte de la empresa representada a través de la consultora durante el período de consultas, lo que acarrea, según UGT, la declaración de nulidad del despido impugnado y la readmisión de 278 trabajadores.
Esa "evidente mala fe", según la sentencia, se evidencia en que tanto la memoria como el despido inicial se sustentó "sobre una base inexistente al buscarse un simple vaciado de personas sin verdadera justificación".
Según explica, es cierto que se celebraron diez reuniones con propuestas y contrapropuestas pero no hubo una auténtica voluntad negociadora con rasgos de buena fe contractual.
Añade que la empresa sacó del listado de afectados a más de 116 trabajadores a principios de este año basándose a nuevos encargos y encomiendas cuya ejecución "ya conocía o pudo conocer" Vaersa ya que las encomiendas eran las habituales y su renovación, previsible.
El Tribunal considera que la empresa señaló expresamente que dejaba sin aplicar todos los apartados referidos a la bolsa de trabajo, plan de acompañamiento, mejoras voluntarias de prestaciones y comisión de valoración y seguimiento, así como los criterios de afectación, con lo que la indemnización era de veinte días por año trabajado "sin contemplar ni reconocer ni una sola, aunque fuera mínima, medida social ni económica adicional".
Además, la empresa mantuvo una postura "fija e inamovible", con lo que concluye que no se negoció de buena fe por parte de la empresa, y agrega que de las consecuencias deberá responder la empresa empleadora.
Las demandas de impugnación de despido colectivo fueron presentadas por UGT y CCOO, y la demandada, dependiente de la Conselleria de Infraestructuras, puede presentar recurso de casación en un plazo de cinco días.
Según algunos datos de la sentencia, a fecha 31 de diciembre de 2011 Vaersa tenía un beneficio superior a los 2,8 millones de euros en relación a las encomiendas de gestión.
Al inicio del procedimiento la empresa planteó la extinción de 439 contratos de una plantilla de 1.441 trabajadores -que luego bajaron a 394 y posteriormente a 278- y alegó causas productivas y organizativas, con el argumento de la reducción de los presupuestos tanto de la Generalitat como de Vaersa, en este último caso del -17,65 %.
Consultada por la Agencia EFE, la Conselleria de Infraestructuras ha evitado pronunciarse hasta disponer de la sentencia.
La Federación de Servicios Públicos de UGT ha avanzado que solicitará la ejecución inmediata de la sentencia aunque la empresa recurra al Tribunal Supremo.
Según este sindicato, la readmisión de todos los trabajadores incluye a doce delegados de personal y delegados sindicales que habían sido despedidos "vulnerando derechos fundamentales reconocidos en la Ley Orgánica de Libertad Sindical".
En un comunicado, la UGT reclama la dimisión de la consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, y del director general de Vaersa, Enrique Simó, y agrega que la "desfachatez" de Vaersa llega al punto de haber ofertado diecinueve puestos de trabajo tras el ERE.
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