un retrato de un país en descomposición..
Nueve madres solteras 'okupan' un edificio vacío en Málaga y reclaman un alquiler social
- Han bautizado su nuevo hogar como 'La corrala de las luchadoras'.
- "Solo una de nosotras trabaja a media jornada y recibe 400 al mes", explican.
- Puntualizan que quieren pagar un alquiler social, "aquí o donde nos lo den".
Estefanía, Noelia, Lidia, Rosa, Juana, Ángeles, Cristina, Rosi y Loli. Estas nueve madres solteras de Málaga decidieron el pasado 19 de abril okupar un edificio del barrio de la Goleta porque no tienen dinero para pagar un piso. Todas tienen hijos a su cargo –hay 10 menores en el inmueble– y han decidido bautizar su nuevo hogar como La corrala de las luchadoras. "Solo una de nosotras trabaja a media jornada y recibe 400 al mes", explica Estefanía. Otras tienen contratos de una o dos horas semanales limpiando en casas y hay quien acaba de perder el trabajo que tenía.
Las vecinas confiesan que tienen miedo de salir para no ver a la Policía Nacional, ya que durante la primera semana las tuvieron "retenidas en comisaría 8 horas". Y varios días después "volvieron y aporrearon las puertas", recuerdan. "Mis hijos están muy contentos, pero tienen miedo de la Policía", dice Rosa, que no trabaja y tiene dos niños de 2 y 6 años.
Mi hijo de 6 años se cree que tengo una casa nueva Estefanía, que tiene a dos hermanas también en la okupación, relata que el vecindario les ha acogido bien. De hecho, ellas mismas han vivido toda la vida en la Goleta y por eso conocían el estado del edificio y pensaron en entrar. Pero matiza: "Menos los inquilinos del edificio de enfrente, que dicen que nos van a denunciar".
Y es que el inmueble está prácticamente para entrar a vivir, sin estrenar, bien pintado… Y ellas se han encargado de adecentarlo. Precisamente han tenido problemas con las aguas residuales y han hecho una colecta para llamar a una empresa de desatoros. Todavía no hacen vida completa allí, porque en el poco tiempo que llevan no han podido montar cocinas, aunque la mayoría de los nuevos hogares tiene ya televisión. "Vamos a casa de nuestras madres a comer", explican.
Todas coinciden en que quieren pagar un alquiler social –"en este edificio o donde nos lo den"– y detallan que se encontraron "las puertas abiertas y las casas con luz y agua". Ayer mismo recibieron la visita de trabajadores sociales del Ayuntamiento y esperan quedarse allí el máximo tiempo posible: "Mi hijo de 6 años se cree que tengo una casa nueva", remata Rosa.
Con denuncia y abogado
La corrala de las luchadoras, cuya okupación partió de las propias inquilinas porque son vecinas del barrio y conocían el abandono del edificio "desde 2005", tiene el apoyo de la plataforma Stop Desahucios y de un abogado ligado a ella, José Cosín. El letrado, que se personó ayer mismo en los juzgados porque explica que la Policía Local las denunció, se queja: "No puede haber pisos eternamente vacíos y personas pasando frío en la calle".
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