Los empresarios temen el fin de reformas en España tras la pérdida de votos del PP

ahora los "medios de información" hablan de "los empresarios", así, en plural, como si todos fueran iguales, y como si tuvieran las mismas necesidades.. pero es que ahora, además, parecería que Rajoy no va a hacer ajustes (ha subido impuestos, ha recortado en los "vicios" de la "clase media" como Sanidad y Educación.. pero no ha tocado nada de la burocracia, de la casta que ha arruinado el país..) por la "pérdida de votos".. qué raro.. ahora que los ajustes estaban dando frutos..

hay que distinguir, por lo menos, dos clases de empresarios:

• el que tiene una pequeña industra, una tienda, una empresa.. apaleado por las subidas de impuestos, tasas, la electricidad más cara de Europa, por una burocracia paralizante (que le hace perder mucho tiempo, y dinero) y que tiene que lidiar con el cacique local,
• el que es amiguito, que vive al calor del BOE, que luego puede facturar el doble gracias a "sobre-costes" y, que encima, si por alguna extraña razón la cosa se tuerce, es rescatado.. y aquí paz y después gloria..

aclarado éste punto, vamos a mirar las reformas que piden éstos dos grupos claramente diferenciados:

los empresarios (del BOE) quieren más licitaciones, más concursos, más obra pública, más externalizaciones.. más "libremercado" (del que sólo se van a beneficiar ellos, claro), y a eso lo llaman "reformas"..

los empresarios, vamos a llamar "normales" (lo que sería normal en otros países) quieren cosas muy distintas: impuestos aceptables, tasas razonables, precio de la electricidad acorde con los precios de producción (y además no ser multados salvajemente por osar instalarse unas plaquitas fotovoltaicas), una Administración ágil, eficiente, menos burocracia..

disfruten lo votado..


Los empresarios temen el fin de reformas en España tras la pérdida de votos del PP

• Pesimismo en CEOE con que Rajoy prosiga el ajuste y la mejora de la competitividad
• 'Hay un serio riesgo de que el Gobierno deje de tomar medidas impopulares', afirman

Los grandes empresarios españoles temen que la caída electoral del Partido Popular (PP) lleve al Gobierno a frenar las medidas de ajuste y reformas necesarias para sanear definitivamente las cuentas y hacer más competitiva a la economía. Fuentes de la patronal CEOE aseguraron a este diario que el presidente, Juan Rosell, va a hacer gestiones en el Gobierno para que mantenga el pulso reformista en el mercado laboral, en la Administración o la lucha contra el déficit, pero que las perspectivas son pesimistas.

"Tras este resultado electoral hay un serio riesgo de que el Gobierno deje de tomar medidas impopulares que son necesarias para hacer la economía española más competitiva y acelerar la recuperación", señalaron fuentes de CEOE.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, reivindicó ayer que su partido había ganado las elecciones "con una agenda reformista más intensa que en otros países", pero al exponer la intervención del presidente, Mariano Rajoy, ante el comité ejecutivo del partido, no mencionó ninguna insistencia en reformas estructurales o nuevas medidas de control del gasto público. Sí señaló Cospedal que "las medidas tomadas están dando sus frutos".

En una iniciativa inusual las patronales de los grandes países europeos (Alemania, Francia, Italia, España y Polonia) emitieron ayer un comunicado conjunto válido no solo para el Gobierno de Rajoy, sino el de Merkel y demás socios de la UE. En él consideraron que lo que deben valorar los dirigentes políticos es que han ganado globalmente los europeístas y que, por tanto, el mandato es continuar e intensificar el programa de los últimos años.

En su opinión, ante la "clara mayoría de partidos a favor de la integración europea", lo adecuado ahora es "adoptar medidas decididas a través de sus representantes en el Parlamento Europeo, la Comisión y el Consejo con el fin de centrar la política de la UE en los grandes problemas mundiales y poner fin a interferencias innecesarias en la vida cotidiana de los ciudadanos". El objetivo debe ser conseguir "una UE fuerte y competitiva a nivel mundial".

En su comunicado reclaman a los gobiernos de sus países "opciones políticas valientes" con más «consolidación fiscal» -ajuste- y reformas estructurales. "¡Ha llegado el momento de los hechos y no de las palabras!", llegaron a exclamar. "Ya no es tiempo de utilizar a Europa como un chivo expiatorio fácil, asumiendo toda la culpa de las dificultades económicas y los miedos colectivos respecto al futuro", afirman en el comunicado al que se ha adherido con su firma el propio Rosell.

"Les corresponde a los Gobiernos y a las Instituciones de la UE aprovechar esta oportunidad y mostrar a sus ciudadanos las ventajas de una mayor integración", declararon, resaltando que ni Alemania tiene futuro fuera del club comunitario: "Ningún país de la UE en solitario, por muy grande que sea, puede ser capaz de mantener su peso e influir en los grandes cambios mundiales en igualdad de condiciones".

En su opinión, "la Europa de los 28 necesita un realineamiento político que se centre en la competitividad mundial, el crecimiento, la prosperidad y el empleo (...) La Zona Euro, los 18 países que comparten un destino aún más unido, necesita mayor cooperación y control democrático con el fin de promover la convergencia hacia unos mayores niveles de competitividad mundial y de inclusión de sus ciudadanos".

Altos empresarios y banqueros del país ya incidieron en el problema incluso antes de que se constatara la pérdida de cinco millones de votos por parte de los dos grandes partidos. El presidente del Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC), César Alierta, evocó la necesidad de continuar con las reformas ante el propio Rajoy el pasado día 7 tras felicitarle por los logros alcanzados. El pasado día 22, el presidente de la Caixa, Isidro Fainé, señaló ante la asamblea general de la entidad que "hace falta perserverar; la complacencia puede ser nuestro principal enemigo".

El presidente de Cepyme y vicepresidente de CEOE, Jesús Terciado, fue ayer más allá de las reformas económicas. Defendió que la estructura política de España "tiene que cambiar", ya que el sistema de partidos políticos con listas cerradas "no tiene mucho sentido".

Según Servimedia, Terciado constató "desafección" general hacia las instituciones y los partidos que va «mucho más allá de la corrupción". Tras intervenir en una jornada sobre el Plan Estratégico de Internacionalización de la Economía Española 2014-2015, Terciado señaló que los ciudadanos "quieren saber a quien votan" y "quién va a defender sus intereses".

La Confederación Europea de Sindicatos que preside actualmente Ignacio Fernández Toxo, atribuyó ayer al hastío de los votantes, el varapalo sufrido por varios gobiernos europeos en las elecciones europeas. "Los ciudadanos europeos están hartos del desempleo, de la austeridad y del empeoramiento de sus estándares de vida", afirmó a secretaria general de la CES, Bernadette Ségol.