200 pakistanies se atrincheran durante 3 días en una sede de la cruz roja, destrozándola.
El ayuntamiento tenía reservadas salas de un restaurante donde solían
comer los trabajadores del tren y los habían dividido por nacionalidad,
cocinando menús según religión de dicha nacionalidad. Evidentemente
gratuito (los trabajadores del tren deben pagar).
El menú del dia que estalla la revuelta estaba compuesto por un primer
plato de pasta al tomate, de segundo pollo con alcachofas y salteado de
verduras, agua, pan y postre.
Según los "refugiados" deben ir muchisimas veces al hospital con dolor de
barriga ya que la pasta es servida con demasiado tomate y demasiado
aceite de oliva.
Otra de las quejas es que si van al hospital: deben esperar, además quieren una casa donde cocinar sus propios platos.
Mediadores interculturales, la representación de los "refugiados", el alcalde
y la policia deciden mantener una reunión ya que es intolerable que la
pasta y el arroz no se cocine a su gusto.
El alcalde en rueda de prensa dice que todo ha sido un pequeño mal
entendido; la pasta y el arroz de primera calidad servida no se cocina
al punto exacto para el paladar pakistaní.
disfruten lo inmigrado..
«Non ci lamentiamo del cibo, ma di come viene cucinato» - Reggio Emilia - il Resto del Carlino
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