Rajoy, a Mas y Urkullu: «Fuera de España y de la UE se está condenado a la nada»

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la Xunta y candidato a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, peinaron ayer Galicia. Hasta en tres pueblos del interior de Lugo participó en mítines el líder del PP, mientras que Feijóo y otros altos cargos se dedicaban a las ciudades. Pero antes Rajoy hizo campaña en Bilbao junto al cabeza de lista del PP vasco, Antonio Basagoiti. Allí, el jefe del Ejecutivo advirtió a Artur Mas y al PNV: «Fuera de España y de la UE se está en ninguna parte y condenados a la nada».


Rajoy destacó que «apartarse de la Constitución» y de los respectivos estatutos de autonomía «significa apartarse de la prosperidad, del bienestar y del empleo» y mantuvo que los vascos y los catalanes, al igual que el resto de los españoles, quieren crecer económicamente y generar empleo. «No quieren cerrarse al mundo», explicó.


El líder del PP llamó al Ejecutivo vasco que salga de las urnas el próximo domingo a ocuparse «de lo importante», dejarse «de rupturas y de líos» y dedicar «todos sus esfuerzos a crear empleo y mejorar los servicios públicos».


En su intervención Rajoy dijo que el PP quiere que el próximo Gobierno vasco «trabaje conjuntamente» con el Ejecutivo central para afrontar la crisis económica y le instó a aportar estabilidad y a dejarse «de discusiones sobre marcos de convivencia que no llevan a ninguna parte y sólo generan incertidumbre, que es lo que menos conviene a España».


«El mayor error que se podría cometer hoy día sería sumar a la crisis económica una crisis política e institucional», advirtió, en referencia a las aspiraciones de los partidos nacionalistas de Cataluña y del País Vasco.


Así, destacó que en el mensaje del PP no entran «ni las ambigüedades, ni los claroscuros», y ha indicado que quieren representar a las personas que consideran que ser vasco y español «es una forma natural de ser» y a quienes estiman, como el PP, que la Constitución y el Estatuto de Autonomía constituyen «dos grandes éxitos colectivos en los que caben todos los vascos».


Por la tarde, Rajoy siguió haciendo campaña en Galicia. As Nogais, Baralla y Guitiriz son los tres núcleos lucenses por los que pasó. Y en esta última localidad llegó a improvisar un discurso en el que pidió el voto «como gallego que soy».


«España no necesita líos, ni discusiones ni intentos de irse para otro lado» y sí «mucho sentido común», enfatizó Rajoy en Guitiriz. En un tono cercano, reconoció que la situación económica es «muy difícil» y obliga a ejecutar decisiones que «no son simpáticas», pero añadió que ningún Gobierno ni ningún gobernante siguen este camino «con el ánimo de fastidiar a la gente».


«Se toman para decir que en un período de tiempo razonable empezamos a crecer, a crear empleo. Y, a partir de ahí, cuando empecemos, la gente va a pagar impuestos, va a cotizar más a la Seguridad Social y por tanto, podremos tener mejores pensiones y mejores servicios, sobre todo sanidad y educación», explicó.


Entre tanto, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, acudió a La Coruña para apoyar a su candidato, Pachi Vázquez. Allí aprovechó para denunciar que «Feijóo está buscando un puesto en Madrid, por eso obedece en todo a Rajoy». «Hay que pararle los pies a esta derecha», reivindicó. Y resumió el programa con el que concurre Feijóo: «Si no te gusta Rajoy, tomarás dos tazas».


Por su parte, el ex portavoz de la izquierda aberzale Arnaldo Otegi intervino, mediante una grabación, en un mitin de EH Bildu en Baracaldo y dijo sentirse confiado en la victoria y en las aspiraciones independentistas del País Vasco, al tiempo que llamó a «vaciar las cárceles» y a ocupar la calle.


La voz de Otegi se escuchó en un mitin al que asistieron 10.000 personas, que desde el inicio corearon gritos a favor de la independencia y en demanda del acercamiento de los presos y de la amnistía.


En el audio, que se escuchó mientras había una imagen suya sobre el escenario, Otegi se refirió, en primer lugar, a la situación de crisis económica y subrayó que «el Estado español está débil», lo que, a su entender, hace que el modelo autonómico esté «muerto» y «superado». Por ello, instó a «abordar tres tareas», empezando por «asentar un escenario de soluciones democráticas».


En este sentido, dijo que la «consigna» ahora debe ser «vaciar las cárceles y ocupar las calles en defensa de nuestros derechos» para combatir «a los enemigos de la paz». «Ésa debe ser nuestra consigna».

Rajoy, a Mas y Urkullu: «Fuera de España y de la UE se está condenado a la nada» - La Nueva España - Diario Independiente de Asturias



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