País de pacotilla: el partido populista se indigna por 4 muertos (y bien que hace.. al menos queda alguien con sentimientos ahí dentro), pero luego ha tragado con todo lo demás; todo el desastre económico generado entorno a esa gran urbe artificial que es Madrid, que si candidaturas olímpicas cada año, que si aeropuertos y sus ampliaciones.. muchos miles de millones despilfarrados para seguir a la altura del barro, porque cuando no hay moral, ni maneras, ni integridad, ni justicia.. sólo queda el barro y la inmundicia..
Aguirre y Botella llevan al PP madrileño a la mayor crisis de su historia / Nacional / Elboletin.com
El PP madrileño se encuentra inmerso en la mayor crisis de su historia
de la mano de Esperanza Aguirre y Ana Botella. Por si la polémica
gestión de la alcaldesa en el Madrid Arena y los vínculos de sus hombres
de confianza con los responsables de Diviertt no fueran suficientes
para desgastar al partido, la líder de los populares no ha
desaprovechado la ocasión para echar más leña al fuego al exigir que
rueden cabezas por la muerte de cuatro jóvenes.
Batalla sin cuartel. Así se podría definir la actual situación en la que
se encuentran los populares madrileños desde que hace menos de dos
semanas se produjese la tragedia del Madrid Arena. La muerte de cuatro
jóvenes ha derivado en una incesante búsqueda de culpables dentro del PP
en la región hasta el punto que ha llevado a esta formación a una
crisis al borde de la ruptura.
La gestión de Ana Botella y su número dos, Miguel Ángel Villanueva, de
este suceso, así como las implicaciones que parece tener el vicealcalde
con Miguel Ángel Flores, dueño de Diviertt, empresa organizadora de la
fiesta de Halloween, ha desatado multitud de críticas en un sector del
PP autonómico que exige depurar responsabilidades. Un clamor que ha
hecho público la propia Esperanza Aguirre.
La expresidenta de la Comunidad de Madrid y líder de los populares
madrileños encabeza esta corriente del partido que presiona a Botella
para que admita su culpa y la de su equipo en esta tragedia y ‘rueden
cabezas’. Una estrategia tras la que, según algunos, se esconde el deseo
de Aguirre de convertirse en la próxima alcaldesa de la capital.
A estas críticas hay que sumar la propia actitud de la regidora que no
ha ayudado a calmar los ánimos en las filas del PP. Su viaje a Portugal
para disfrutar de unos días de descanso en un spa de lujo junto a su
marido, José María Aznar, en medio de la tragedia del Madrid Arena ha
despertado recelos entre sus compañeros de partido que no entienden cómo
no interrumpió sus planes y volvió a la capital.
Además, las últimas noticias sobre la relación del vicealcalde, Miguel
Ángel Villanueva, no hacen más que añadir más leña a este fuego. El
número dos de Botella, según algunas informaciones, casó hace algo más
de un año a José María Flores, hermano de Miguel Ángel Flores,
administrador único y propietario de la empresa Diviertt,
respectivamente.
Una estrecha relación con el vicealcalde que no comparte un sector del
PP madrileño. El propio Alberto Ruiz Gallardón, en su etapa como regidor
de la ciudad, protagonizó más de un roce con Flores, como el que tuvo
lugar a consecuencia de la reapertura de la discoteca Alcalá 20.
Todo esto hace que los populares de la región se encuentren divididos en
dos bandos en una ruptura hasta ahora nunca vista y que ha llevado a la
propia Botella a cerrar filas con la plantilla del Hospital de La
Princesa, en pie de guerra contra el sucesor de Aguirre, Ignacio
González, en una acción histórica.
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