El «número dos» de IU en Andalucía también compró un piso embargado
Considera «cotidiano» adquirir viviendas de desahuciados, como Valderas
El portavoz de IULV-CA en el Parlamento andaluz, José Antonio Castro,
también es propietario de un inmueble que había sido embargado por
impagos. En este caso, el banco se quedó con una vivienda de una
sociedad inmobiliaria y él la adquirió posteriormente. Según consta en
su declaración de actividades, retribuciones, bienes e intereses
entregada en la Cámara andaluza, es propietario de la mitad de una
vivienda en Málaga con un valor catastral de 44.737,20 euros. Sobre esta
propiedad tiene formalizada la mitad de un crédito hipotecario por
31.982 euros con la entidad financiera Unicaja. Castro, por cierto, es
miembro de la Asamblea General de esta caja elegido por el Parlamento
desde 2006.
Fue el propio portavoz de IU el que informó ayer de que adquirió su
vivienda habitual tras un embargo. Lo hizo para justificar que el
vicepresidente de la Junta –y hasta hace semanas coordinador general de
IULV-CA– Diego Valderas, comprara a la Caja de Ahorros El Monte la
vivienda de su vecino después de que éste fuera desahuciado por impago.
Según Castro, «estamos hablando de algo que ha formado parte de la
cotidianidad durante mucho tiempo de este país, y es que se han
embargado viviendas que han pasado al stock de entidades financieras y
que, a su vez, se han puesto a la venta». Para justificar a su
compañero, aseguró que «tendría que estar opinando sobre lo que han
hecho miles y miles de ciudadanos en las mismas condiciones».
Con el reciente decreto antidesahucios que ha aprobado la Junta, ni
Castro ni Valderas podrían haber comprado ninguno de los pisos. La
norma, que será recurrida al Tribunal Constitucional por el Gobierno
tras la inquietud mostrada por la Comisión Europea, impide a las
entidades financieras desahuciar a las familias que no paguen sus rentas
–con determinados requisitos– ya que la Administración andaluza les
expropia el uso del piso durante tres años.
En el caso del stock de viviendas en manos de los bancos, la Junta
obliga a éstos y a las sociedades de inversión y promotoras que tengan
pisos sin vender a ponerlos en alquiler a precios de mercado.
Valderas compró en 1995 el piso de su vecino, propiedad en esos momentos
de la caja de ahorros El Monte. La entidad financiera se hizo con el
inmueble en pública subasta en 1991 y se lo vendió posteriormente al
actual vicepresidente andaluz, que por entonces era presidente del
Parlamento de Andalucía después de haber sido alcalde de su pueblo
–Bollullos Par del Condado (Huelva)– desde 1979 y hasta 1994.
El dirigente de IU formalizó un crédito hipotecario por 18.030,36 euros
con la misma caja de ahorros. En la escritura consultada por este
periódico consta que se le aplica un diferencial sobre el tipo de
referencia «de cero puntos». Según fuentes consultadas por LA RAZÓN, era
habitual en esa época que al Índice de Referencia de Préstamos
Hipotecarios (IRPH) de las cajas no se le añadiera una nueva carga. Los
dos primeros años el interés nominal pactado era del 10,50.
Posteriormente a la compra, el matrimonio Valderas solicitó licencia en
el Ayuntamiento –del que había sido alcalde– para unir ambos pisos –el
suyo y el que era de su vecino–. Hoy disfruta de un inmueble de 190
metros cuadrados en el centro del municipio.
Un piso de 190 metros para el adalid de los desahuciados
Pese a su escaso impacto real, la ley antidesahucios de la Junta de
Andalucía ha sido utilizada por Diego Valderas para cargar contra el PP,
la Comisión Europea y los bancos. Ésta es sólo una de las perlas del
dirigente comunista solidarizándose con los desahuciados: «Estamos del
lado de las personas que están siendo desahuciadas frente a los bancos».
A la derecha, el plano de las dos casas que, tras la reforma, se
convirtieron en un piso de 190 metros.
Aqui el pisoteniente:
Y aqui los dos pisotenientes a costa de los deshaucios:
No hay comentarios:
Publicar un comentario