El denominador común de 25 contenedores con armas, un museo nazi, un diario dominical y un armador prófugo
El jueves 17 de octubre en un registro de la Policía en el museo militar
del empresario Palis en las afueras de Atenas se descubrió 25
contenedores con un verdadero arsenal con miles de armas, así como un…
“museo del nazismo”.
La Policía llegó a este escondite siguiendo las instrucciones de un ex
miembro de la banda neonazi Aurora Dorada, quien testificó como testigo
protegido sobre la financiación de la banda por empresarios, armadores y
otros capitalistas, y sobre sus vínculos con el tráfico de armas y los
negocios de la noche. También, un ex militar británico fue la persona
que se chivó a Palis a la Policía griega. El militar había sido
contratado por Palis para montar otro negocio oscuro relacionado con la
piratería marítima. Palis no sólo se negó a pagarle el precio
estipulado, sino que trató de forzarle a firmar que no le debía nada, y
cuando no lo consiguió, trató de secuestrarlo.
El ex militar proporcionó a la Policía muchas informaciones sobre la
ubicación del arsenal de Palis y las miles de armas que estaban
almacanados en los contenedores. Señalamos que la testificación del
británico se realizó el 2 de junio pasado. Un día después de su demanda,
la Policía realizó un registro en la mansión lujosa del empresario,
pero no encontró nada…
Unas horas antes del descubrimiento del arsenal y del museo del nazismo,
el miércoles 16 de octubre, en la mansión del mismo empresario se
habían descubierto decenas de armas automáticas registradas ilegalmente
como armas de caza, pistolas, colimadoras, cuchillos, navajas y los
mandos con los que se abrieron los contenedores con las armas cerca de
su museo privado. También, en el puerto del Pireo en un contenedor que
se le había enviado al Palis pero él nunca se presentó para recibirlo,
se descubrió un arma anti-aérea desmontada.
De momento se ha registrado tan sólo uno de los 25 contenedores en las
proximidades de un museo privado que había montado en las afueras de
Atenas. En la casa del capitalista, a quien el ex militar británico
acusa de tener estrechas relaciones con Aurora Dorada, se descubrieron
armas automáticas de tipo G3 y Kalasnikov, 60 cuchillos, diez pistolas
Walther 357 Magnum, Walther 9 mm, Glock 9 mm, Glock 0,45, rifles con
proyectiles de mortero en una caja de metal, rifles con mira
telescópica, cartuchos de diferentes calibres, ballestas, un escudo de
la Policía griega, dos armas Taser, varios teléfonos móviles y tarjetas
SIM, cámaras de vídeos, cámaras fotográficas y dispositivos de
comunicación inalámbricos. En el “museo” nazi se encontraron maniquíes
vestidos con uniformes nazis, fotos, banderas, estandartes y todo tipo
de parafernalia fascista.
El empresario era hasta
hace un año co-dueño y el mayor accionista de uno de los dos mayores
diarios dominicales en Grecia, titulado “To Proto Thema”, el cual lleva
años dedicándose a una promoción de esta banda fascista, allanando
el camino al fascismo y presentando a sus miembros y dirigentes como
unos personajes majos y pintorescos pero “patriotas”, como unos chavales
rabiosos con el sistema político corrupto, que crean guarderías, ayudan
a personas mayores y luchan contra el “enemigo externo” y el “enemigo
interno”. La promoción de las acción fascista siempre iba acompañada por
una buena dosis de bromas y “estilo de vida”, presentando los temas
relativos a la ligera pero con varios y múltiples mensajes subliminales a
favor de esta banda y del fascismo en general.
También,
Palis era socio de otro capitalista, de un armador (propietario de una
de las cinco compañías navieras más grandes en Grecia) que está
encarcelado por malversación de fondos, deudas enormes al Estado,
especulación fraudulenta y lavado de dinero. Además de esta conexión con
el mundo sucio de las élites económicas, es accionista en varios medios
desinformativos, entre ellos el periódico To Proto Thema. De momento
Palis es prófugo por varios delitos (tenencia y tráfico ilegal de armas,
secuestro, chantaje, extorsión, delitos financieros y bancarios).
Las íntimas relaciones de los fascistas griegos con el Capital local y trasnacional
no deben extrañar a nadie. Las sospechas sobre la financiación de su
banda por capitalistas griegos y extranjeros son algo más que meros
indicios. En el Parlamento sus diputados varias veces han apoyado las
posiciones de los industriales, armadores, empresarios y demás
capitalistas. Lo mismo han hecho sus dirigentes y sus miembros más
destacados en numerosos casos de huelgas, movilizaciones y
reivindicaciones obreras. Recordemos su incitación a los obreros de
Acería Griega a poner fin a su huelga, las varias tentativas violentas o
“subterráneas” de reprimir cualquier demanda por parte de los
trabajadores en los astilleros, la defensa de los los intereses de la
empresa minera Oro Griego y de sus mercenarios, su reacción y oposición
al aumento de los mínimos impuestos que pagan los armadores al Estado,
su apoyo al cierre de la Radiotelevisión estatal, el escándalo de la
venta del Banco Agrícola al Banco del Pireo, y muchísimos casos más.
Tampoco hay que extrañarnos el descubrimiento tardío de este arsenal y
escondite nazi. El denominador común de los últimos descubrimientos, de
la prensa burguesa y del Capital es el hermano gemelo de la Democracia,
el fascismo, como brazo armado y del Régimen, y como muleta y reserva de
un sistema económico y social tan corrupto y podrido como él.
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