un claro ejemplo de "ver la paja en ojo ajeno y no ver la viga en el propio".. porque dudo mucho que la situación de los Ayuntamientos en hispanistán sea mucho mejor..
Ayuntamientos alemanes en quiebra
Unos diez millones de alemanes viven en ciudades prácticamente
insolventes. A pesar de que Merkel ha impuesto la disciplina
presupuestaria y el superávit en las cuentas federales, los Länder y los
Ayuntamientos no se dejan meter en cintura y Alemania mantiene una
deuda del 81% de su PIB. La canciller alemana no consigue que se
apliquen sus recetas en casa, sobre todo en aquellos municipios más
afectados por la crisis.
En el centro de Oberhausen, una ciudad de algo más de 200.000 habitantes
cerca ya de la frontera con Holanda, muchas tiendas han ido cerrando.
Proliferan los negocios de "todo a 1€" y el nivel de recaudación fiscal
por actividad económica se ha desplomado. El ayuntamiento, ahora
presidido por el socialdemócrata Klaus Wehling, no ha seguido los
principios de austeridad que Merkel vende en toda Europa y, en lugar de
limitar sus gastos a sus ingresos, lleva años viviendo por encima de sus
posibilidades y endeudándose más y más. Su deuda actual alcanza los
1.800 millones de euros, de forma que cada uno de sus habitantes debe de
media 6.870 euros.
No se trata de un caso aislado. La Fundación Bertelsmann alerta sobre la
existencia de entre 50 y 60 municipios de alrededor de 10 millones de
habitantes en situación de "deuda extrema" y calcula que, entre 2007 y
2011, la deuda de los municipios alemanes ha aumentado en conjunto desde
los 11.000 hasta los 130.000 millones de euros. Estas cifras dan a
entender que los ayuntamientos alemanes necesitan un recate financiero
en toda regla.
"Estas ciudades no podrán deshacerse de semejante deuda por sí mismas",
augura el experto Rene Geißler, de la Fundación Bertelsmann. Geißler
señala que si los ayuntamientos siguen haciendo frente al pago de
servicios básicos, como colegios y recogida de basuras, es gracias a los
denominados "adelantos en efectivo", pasivos no garantizados con otro
tipo de valores y que no se destinan a inversiones ni infraestructuras,
sino a llegar a fin de mes. Este tipo de líneas de crédito
proporcionadas por las cajas regionales ha pasado desde 2007 a 2011
desde los 29.000 millones de euros a los 44.000 millones y suponen
alrededor el 34% del total de la deuda.
La auditora Ernst & Young publicará este miércoles en Berlín su
informe sobre estado de la cuestión, pero es evidente que muchas
ciudades alemanas han comprometido su crecimiento económico y se
encuentran atrapadas en una espiral de deuda que estrangula la inversión
en carreteras, centros municipales y mantenimiento del empleo,
situación que contrasta llamativamente con la fortaleza de la economía
federal alemana.
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